24.3.10

La Mujer Elefante



El ministerio de máquinas infames llegó sin avisar y el pueblo los recibió con los brazos abiertos. Donaron la nueva "máquina para olvidar", una en cada hogar, a la que la gente de ciudad llamaba televisión. El gobierno no pudo percibir ningún cambio en el pueblo hasta pasados unos cuantos años. Fue entonces cuandos las sencillas gentes de este lugar comenzaron a sentir de manera diferente. El mundo no volvió a ser el mismo. 

¿Recuerdas que pasó después? 
No. Yo sólo me acuerdo de la mujer elefante.

17.3.10

Ganchillo y punto de cruz con la teoría de cuerdas



He visto árboles cosiendo el tejido terrestre mientras pequeños insectos hacían ganchillo y punto de cruz con el musgo de las rocas en los albores de la tierra. Bailé con animales de fuego al son de los sordos tambores que aporrean las micropartículas del viento.

Sólo de esta manera conseguí entrar a lo más profundo del universo. Desde el interior del átomo divisé un horizonte de antimateria que me desplazó a la invisible claridad que hay en el centro del agujero negro, donde grupos de cuerdas retuercen la armónica gravedad del todo. Fue entonces cuando el universo se dobló hasta colapsarme en infinitas realidades.

(ilustración y texto by Alfredo)

3.3.10

Caperucita Negra



Erase una vez, una niña que se llamaba Caperucita Negra. Vivía en un bosque artificial de una atmósfera cargada de surrealismo donde nunca salía el sol. Se alimentaba de hadas y de otras alimañas.
El día que se encontró con el lobo, Caperucita esbozó una sonrisa futurista. Antes de que a este le diera tiempo a preguntar que a dónde iba, la niña se abalanzó sobre él. Le dió una paliza y lo llevó a rastras a la casa de su abuelita. Allí, Caperucita y la anciana, abusaron sexualmente del él. Después, le rajaron el vientre y le metieron dentro a un cazador que la abuelita tenía secuestrado desde hacia meses. Le cosieron la panza y los tiraron a los dos al río.
En los cuentos desencantados no hay moraleja.

(ilustración y texto by Alfredo)